los cálamos latidos
de cada centinela,
custodios del
cielo,
en sus himnos
inocentes
anunciando el
incendio del
horizonte antes de
conquistar,
una vez más, con sus
ligeras
acrobacias la intemperie
despertando (así)
a la cuadrada civilización
Z
\m/ \m/
Interesante poema, esperando un amanecer.
ResponderEliminarUn abrazo, y feliz Navidad