la hospitalidad de la estrella quema
como la llama que ciega sin creer
con el viento juega
calor sin regla sin dirección
llamarada movimiento sombras
de noche incendio
común al centro elemento
vigila dormido el poder que
dentro tiene
se expande avanza crece
y al rozar el infinito la muerte
de todo la vida nada
sin luz sin oscuridad
sin presión sin espacio sin tiempo
perpetua eternidad comienzo silencio