invocaré a los vientos del norte
para que sean mis cómplices y
poder despeinarte y en ideas
lascivas acampanar tus faldas
invocaré a las tormentas en
cualquiera de sus intensidades
besar Tu piel en cada gota
invocaré a los infiernos
para despertar tus fuegos internos
invocaré a los cielos
para dirigir al sol, convertirme
a Tu camino en cualquier sombra
y para pedirle a la noche que me
lleve a tus sueños, donde seré Tu
demonio esclavo
pero también Tu caballero dueño
Este poema es hermoso
ResponderEliminartal vez diferente,
tal vez más comprensible
tal vez más tierno
tal vez...
besitos bicho
feliz dia en Marte
:)
Un caballero dueño y demonio esclavo, me gustó... eres camino... para guiar los sueños...
ResponderEliminarUn placer leerte, mi poeta encantador.
Besos.